Miles de fieles llegaron a Andacollo, después de 3 años, para celebrar una vez más la Fiesta Grande en honor a la Chinita milagrosa de la montaña como es conocida cariñosamente la Imagen de Nuestra Señora del Rosario.
Ayer 26, el día central de la festividad volvieron a realizarse con normalidad dos de las principales actividades litúrgicas tradicionales como son la Eucaristía solemne, que fue presidida por Monseñor René Rebolledo y concelebrada por varios sacerdotes, y por la tarde se efectúo la procesión con la Sagrada Imagen en su anda por las calles de la comuna.
Al iniciar su homilía el pastor de nuestra región destacó “que es emotivo encontrarnos aquí después de 3 años. La pandemia nos puso a todos en situaciones muy complejas, por eso creo que debemos estar todos muy contentos y agradecidos del Señor, no obstante que todavía hay hermanos y hermanas que están sufriendo las consecuencias del Covid 19. Sin embargo, ya podemos encontrarnos como comunidad en este lugar santo, lugar de peregrinación, que durante muchos años ha acogido nuestra presencia, nuestras alegrías, nuestros gozos, nuestras satisfacciones, nuestra gratitud, pero también nuestros dolores, sufrimientos y pesares. Hermanas y hermanos que alegría encontrarnos en torno a la mesa de la palabra del Señor”.
El Obispo Rebolledo, más adelante comentó que “la Navidad es un acontecimiento salvador tan grande que lo vamos a celebrar todos estos días hasta el 9 de enero, concluyendo con la fiesta del bautismo de nuestro Señor. Cuando se cumplió el tiempo Dios envío a su hijo por amor, por amor a cada uno de nosotros, por amor a todas las personas de todos los tiempos y de todos los lugares para rescatarlos del pecado y que en propiedad puedan decir yo soy hija, soy hijo de Dios”.
En la jornada de la tarde al concluir la procesión el prelado se dirigió a los fieles para bendecirlos en el regreso a sus hogares e instar a cada uno de los asistentes a agradecer, atesorar y compartir los momentos vividos en el Santuario bajo la tierna mirada de María de Andacollo y que los acompañará hasta volver a estar bajo su presencia en la Fiesta Chica.
En tanto que hoy, 27 de diciembre, concluyó la Fiesta Grande 2022 con la realización de la Eucaristía de despedida y el posterior traslado de la Sagrada Imagen desde la Basílica al Templo Parroquial, donde permanecerá hasta el primer sábado de octubre del próximo año.
Finalmente, el Rector del Santuario agradeció a las distintas instituciones, organizaciones y personas de la comuna que trabajaron durante estos 5 días en las actividades litúrgicas prestando su colaboración y servicio para acoger a los fieles. “La Fiesta no termina hoy, sino que sigue en nuestros corazones para llevar la alegría y bendiciones de estos días vividos acá y compartirlos en nuestros lugares de orígenes” concluyó el Padre Adam Bartyzol.