Con solo 16 años, Carla Pinto se ha convertido en una de las alumnas más destacadas del taller de piano de la Escuela de Talentos de Andacollo. Su constancia diaria y el acompañamiento de su actual maestro, Herman Sapiains, le han permitido desarrollar al máximo su potencial y consolidar su amor por el instrumento.
“Probé el piano y me fascinó. Me gusta la música en general, y en el piano se puede tocar de todo, no solo música clásica”, comenta entusiasmada. Aunque en su camino ha tenido otros maestros, reconoce que con el profesor Herman Sapiains ha logrado desplegar sus mejores capacidades y profundizar en su interpretación musical.
Carla dedica tiempo todos los días al estudio del piano. “Estoy estudiando, leyendo, a veces con más tiempo o menos, pero todos los días practico”, explica. Esa disciplina, unida a la pasión que siente por la música, ha hecho que este hobby se convierta en una parte esencial de su vida.
“El piano es algo que me llena, lo amo y no es algo que quiera dejar”, afirma con convicción la joven pianista. Aunque ha pensado en estudiar música, también le atrae mucho la matemática, por lo que todavía no tiene definido qué camino tomará en el futuro. Lo que sí tiene claro es que el piano seguirá siendo parte fundamental de su vida, y que continuará aprendiendo y perfeccionando su talento en este instrumento.