Una iniciativa que pretende generar una red de medición de esta problemática en tiempo real para lograr tomar medidas en relación a la protección de los cielos.
Desde el año pasado, el taller de astronomía de la escuela Patricio Lynch ha trabajado de la mano de su monitora, Andrea Castillo, reconocida a nivel regional y nacional por su aporte en el área, en las actividades
Hace 10 años se conformó la Brigada de protección de los Cielos en la escuela Patricio Lynch, su monitora, Andrea Castillo, quien ha sido reconocida a nivel regional y nacional por su aporte en el área, creó esta instancia para incentivar a los estudiantes al cuidado de los cielos de Andacollo, permitiendo concientizarlos acerca de su importancia para la observación astronómica y el desarrollo de esta ciencia.
En este sentido, nació el taller de astronomía dentro del establecimiento, y durante la semana pasada se concretó la instalación del primer sensor de contaminación lumínica en la escuela. “Esto se hizo a través de un proyecto que tiene la Universidad de La Serena, denominado Ilumina Consciencia, que trata de generar una red de medición de contaminación lumínica en tiempo real para la toma de decisiones al respecto de esta problemática”.
La semana pasada se concretó la instalación del primer sensor de contaminación lumínica en la escuela Patricio Lynch, lo que se hizo a través de un proyecto que tiene la Universidad de La Serena, denominado “Ilumina Consciencia”, que trata de generar una red de medición de contaminación lumínica en tiempo real para la toma de decisiones al respecto de esta problemática”, indicó Andrea Castillo.
El proyecto se gestó gracias a la participación del taller, la brigada y su monitora, quienes estuvieron presentes en las conversaciones sobre estas necesidades actuales, permitiendo que la escuela Patricio Lynch fuera uno de los seis establecimientos elegidos para tener este sensor, lo que además conlleva una capacitación y asesoría de los astrónomos de la Universidad de La Serena.
Para Andrea Castillo es importante continuar abordando la problemática de la contaminación lumínica, pero además, es fundamental expandir la brigada a otros establecimientos e incluso a otras comunas de la región, para generar una gran red de protectores de los cielos, generando un aporte al mundo astronómico.