El pasado 12 de agosto la “Agrupación Antonio Fernández Cuervo” cumplió 15 años de servicio social en beneficio de los adultos mayores de la comuna en situación de vulnerabilidad. Este trabajo solidario partió como una iniciativa de los padres y apoderados de la Escuela Padre Claret, para proporcionar almuerzo a los abuelitos y abuelitas que lo necesitan por diferentes razones.
Funciona al alero de la Parroquia, en colaboración con la Acción Social. Pero, lo más destacable es el trabajo de voluntariado que realizan 12 mujeres y 1 varón, quienes se preocupan de la preparación diaria de los almuerzos, para lo cual se organizan en grupos y trabajan por una semana al mes cada uno.
Para solventar algunas compras durante el año trabajan durante las Fiestas Religiosas de octubre y diciembre en los baños públicos ubicados a un costado de la Basílica. Los gastos de agua y luz son costeados por la Parroquia y reciben cooperaciones de personas anónimas que donan pan, leche, huevos, papas, etc.
La encargada es la señora Adriana Galleguillos quien es una de las 4 socias fundadoras que continúan en esta labor que comenzó en agosto del 2002, además destaca el apoyo de su entorno cercano, pues “cada uno de nosotros tiene involucrada a su familia, este es un trabajo familiar las voluntarias están comprometidas con los abuelos, pero sin dejar de lado sus casas.
Porque hacer un trabajo voluntario influye en la familia porque son 5 días que se deja la casa, el apoyo de mi esposo ha sido primordial, porque él es voluntario varón que tenemos”.
En este momento en el comedor reciben alimentación 15 adultos mayores, el requisito que se pide es que sea autovalente “para que llegue a nuestro comedor, porque la función principal de nuestro comedor es que compartan el plato de comida que se van a servir” concluye la señora Adriana.