En su cuarto periodo como presidente del Sindicato de Pirquineros de Andacollo se encuentra don Luis Véliz Segovia, hombre amable, de trato cordial muy querendón de su familia especialmente de sus nietos.
Se ha dedicado toda una vida a la minería, con una gran conciencia social ya que siempre ha buscado lo mejor para sus colegas, lo que le ha significado que confíen en él y lo elijan para que los represente, además él mismo nos comenta que están considerados como una de las mejores organizaciones de la región.
Luis Véliz lleva 34 años de casado con Noralda Segovia Araya, tienen tres hijas que sólo al nombrarlas se emociona, hijas que le han dado su mayor alegría que son sus cuatro nietos, se dedica desde que salió de la enseñanza básica a la minería “sólo podíamos aspirar a terminar la enseñanza básica ya que no teníamos más medios como familia y había que aportar, así que a los 15 años me fui a la mina como muchos jóvenes de mi edad en aquellos años”.
Su hija menor, Patricia Véliz, profesora universitaria, nos describe a don Luis de esta manera: “un hombre maravilloso, cariñoso, incondicional, amante de su familia, protector, honrado, justo, inteligente, trabajador, un ave en vuelo que tiene los pies bien puestos en el suelo, perseverante, mi ejemplo de vida, para mi…un hombre completo”
Siempre dedicado a la mina, sólo hizo un paréntesis de 8 años “cuando el precio de los metales estuvo muy bajo me dedique a otras labores como construcción de proyectos mineros para el norte, también de temporero ya que la minería no era rentable”.
En cuanto al escenario que hoy presenta la minería don Luis nos indica que “hemos pasado por crisis peores y creo que vamos a salir adelante, lo malo es que bajan los precios de los metales pero los costos se mantienen igual y es ahí donde nos complicamos, por eso debemos sensibilizar por ejemplo a los transportistas, quienes son los que nos trasladan el material”.
Don Luis Véliz nos cuenta como es su día a día, “comienza a las 6:30 de la mañana, me tomo una tacita de leche y parto en mi bicicleta al polvorín, a atender a los socios, ahí se les distribuye el material explosivo, yo estoy a cargo de la distribución y debo llevar el orden en un cuaderno, ahí estoy hasta las 09:00 donde regreso a mi casa a tomar desayuno y termino mi labor del polvorín haciendo mis anotaciones, y después si no tengo que ir a alguna reunión, asumo mi rol como pirquinero y me voy a la mina a trabajar hasta como las cinco de la tarde, ahí empiezo a atender los llamados de los socios con sus inquietudes, tomo mi rol de dirigente nuevamente y estoy al servicio de mis colegas….y esa es mi vida”.
Dice que se ha ganado su lugar en la dirigencia del Sindicato de Pirquineros trabajando para lo que uno cree que son las necesidades de su sector “hay que ser representativo, no sacamos nada con ser dirigente y aprovecharnos del cargo, aquí la cosa es colectiva, hemos logrado obtener logros que nunca se habían obtenido, nosotros como sindicato fuimos la base en la región para conseguir por primera vez un FNDR para la minería regional”, la clave es trabajar en equipo, no es un trabajo sólo mío son varios los dirigentes que trabajan arduamente.
Finalmente nuestro dirigente pirquinero dice que tiene un gran sueño para los pirquineros de Andacollo, “queremos tener una planta piloto donde se procese en baja escala, unas 80 toneladas de material en el día y que la puedan utilizar los asociados, ese es mi sueño y esperamos que la autoridades y empresas nos puedan ayudar”.