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Voluntarias de la Oficina de la Solidaridad de la Parroquia de Andacollo desarrollan acción social para quienes lo necesitan
Actualmente, se encuentran ubicadas en casa Claret, y reciben alimentos no perecibles y donaciones para ayudar a las familias en tiempos complejos.
Son alrededor de 80 personas las que reciben una bolsa de alimentos mensualmente, y todo lo que se recauda es gracias al trabajo de las tres voluntarias, Elizabeth Cortés, Soledad Araya y Carmen Olivares. Mujeres solidarias que están dispuestas a contribuir en la ayuda social, sobre todo, para aquellos que más lo necesitan, y también a las donaciones de alimentos que realizan colaboradores y personas de la comuna.
Al respecto, Elizabeth Cortés, actualmente voluntaria de la Oficina de la Solidaridad y quien se desempeñó como asistente social del Hospital de Andacollo, explicó que, “trabajamos entregando alimentos a través de donaciones que nos llegan desde distintas personas. También, vendemos ropa usada para solventar los gastos cuando faltan insumos, porque la idea es mantener la ayuda estable”.
La oficina funciona lunes en la mañana y martes en la tarde, hasta ahí se pueden acercar quienes quieran cooperar con alimentos o con ropa para donar, además quien necesite ayuda también puede acudir al lugar.
La labor social que realizan estas tres mujeres es, sin duda, una acción de generosidad al prójimo, y por eso, Elizabeth manifestó, “esto es algo muy satisfactorio, yo he trabajado toda la vida en el ámbito social, porque de profesión soy asistente social, entonces es satisfactorio ayudar, ver a las personas que necesitan ser apoyadas, valoradas, es algo lindo para nosotras”.
